Hola a tod@s! Después de una semana de mucho ajetreo volvemos con otra entrada que seguro que os va a sorprender de lo sencilla que es. Se trata de DIY que hizo Miguel para sus hijos hace ya muchos años y que no tiene desperdicio, así que atentos.
Hoy necesitaremos:
-En nuestro caso un bote de pelotas de tenis(pero vale cualquiera de cartón, como del papel aluminio)
-Cristal de espejo.
-"Relleno": trocitos de plástico, cristal,rodamientos... todo lo que se os ocurra y cuanto mas colorido mejor.
-Dos cristales translúcidos.
A por ello!
Hacemos un agujero (en este caso en la parte inferior) y le pegamos un tapón de una botella de agua de la siguiente manera. Por aquí es por donde miraremos.
Y en la otra parte aprovecharemos el plástico para que nos sirva de cierre.
Cortamos el cristal en tres rectángulos que no sean mas grandes que el bote y los colocamos formando un triangulo equilátero y lo atamos con cinta. De esta manera.
Lo metemos dentro del tubo y para dejarlo mas o menos centrado y que se sujete le ponemos papel o corcho blanco.
Ahora ponemos el primer cristal circular y echamos nuestro "relleno" y también ponemos un plástico para separar con el cristal que le ponemos a continuación. Y cerramos.
Y ahora ya podemos mirar a través de el, y esto es lo que os vais a encontrar.
Muchas gracias a Miguel por este DIY y nos vemos pronto. Besos :).
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